Discipulados

Jesús nos dejó un modelo de amor que se fundamenta en la compasión. Hacer discípulos es la razón de nuestra existencia como Iglesia. Por medio del Modelo de Jesús deseamos poder ganar a Guatemala para Cristo. 

El servicio a Dios forma parte de nuestro estilo de vida. Por medio del servicio nuestra vida es transformada y podemos ser hechos conforme el deseo de Dios.

Nuestro servicio a Dios debe de generar experiencias agradables a las personas. Por medio del servicio a Dios podemos aprender principios que aplicamos en nuestra vida cotidiana que generan éxito en diferentes áreas de nuestra vida. 

El servicio a Dios debe de estar presente en nuestra vida cómo hijos suyos que somos. Existen requisitos que Dios nos pide para poder hacerlo conforme al deseo de su corazón. No te pierdas esta enseñanza y comparte con tus amigos.

Jesús nos enseñó por medio de su ejemplo a servir a Dios y a los hombres. Existen claves para poder servir como a Dios le agrada. Aprende por medio de este discipulado las claves que permiten que nuestro servicio sea agradable ante los ojos de Dios. 

Jesús nos enseña con su vida que debemos de servir a Dios. También nos enseña sobre los motivadores correctos que debemos de tener cuando deseamos servirle. Aprendamos en este tiempo a poder servir a Dios de la manera que Él espera que lo podamos hacer. 

Dios nos ha provisto de fe a cada uno. Por medio de esa fe podemos hacer multiplicar todo lo que tenemos en nuestras manos. Encontramos muchos ejemplos en la Biblia sobre la multiplicación, y creemos que en este tiempo Dios puede seguir haciendo esos milagros en nuestras vidas. 

Estamos creyendo por un tiempo de Restitución sobre nuestras vidas. Dios nos ha provisto de fe para poder alcanzar y heredar promesas. Esa misma fe, nos permite poder romper con maldiciones en nuestra vida y así poder heredar bendición. 

Dios nos promete restitución. Restituir significa devolver a un dueño original lo que le pertenece y aún más. El Señor prometió derramar Su Espíritu sobre toda carne, pero mientras no confrontemos nuestra realidad con una Palabra de fe, las cosas no cambiarán.

Dios puede cambiar muchas cosas para provocar en nuestra vida un cambio de temporada. La Palabra de Dios nos enseña cómo han surgido a lo largo de la historia cambios favorables para los hijos de Dios aún en medio de la crisis, enfermedad, escasez. Tenemos un Padre que nos promete poder restituir en nuestra vida todo lo que pudiéramos perder.

Todo en esta tierra se somete a la ley de la siembra y la cosecha. Creemos que una semilla tiene el poder de cambiar una temporada, así como el mismo Dios entregó a su hijo Jesucristo para recibir como cosecha a todos nosotros sus hijos. De la misma manera debemos de imitar la acción de sembrar para cosechar y provocar cambios de temporada en nuestra vida.

Dios nos ha llamado a predicar a todo el mundo. Por medio de nuestra Iglesia en Línea podremos llegar a todos los rincones del planeta donde tengan una conexión a Internet. Estamos en una nueva temporada para la Iglesia de Cristo donde podemos cumplir con la gran comisión desde muchos medios y herramientas.